miércoles, 12 de diciembre de 2007

REPRENDIDA POR DAR LA TETA EN LA BIBLIOTECA




Hola a tod@s:

El pasado 7 de diciembre me llamaron la atención por dar de mamar a mi hijo de 2 años en la zona infantil de la Biblioteca Pública de Burgos. Y lo peor de todo es que me hicieron sentir muy mal.


Estoy indignada. Estábamos en la zona infantil sentados en una mesa leyendo tranquilamente libros cuando mi hijo(2 años) me pidió teta. Yo, lo más natural del mundo, me puse a darle de mamar. Al rato vino la guardia de seguridad y me dijo que no podía hacer eso allí. Mi pareja y yo, un poco desconcertados, le preguntamos que porqué y ella nos dijo que eran las normas. Que no se podía comer allí, que si otros no podían comer chucherías pues el tampoco podía comer teta. Que además era un niño muy mayor, que ya andaba y que suponía que ya comía de todo con cuchara. Nosotros seguíamos sin comprender.Y ella siguió argumentando, que si estuviera dando de mamar a mi bebé ( 1 mes) que no me diría nada porque entendía que tenía sus horas de comer pero que al mayor le dijera que esperara a casa.

Le hemos dicho que queríamos hablar con la directora pero no ha venido, a dicho que escribiéramos una queja y ya está. Y una queja en una hoja en blanco porque ellos no tienen hojas de reclamaciones¿¿¿¿¿¿¿¿???????

PORQUE NOS HACEN TAN DIFÍCIL ALGO TAN NATURAL??????



Entiendo que en la biblioteca exista una norma por la cual no se permita comer en ese espacio, para no manchar los libros, pero es que la teta no mancha, y la teta no es sólo alimento.

Y cual es el límite para permitir que los niños mamen en esta biblioteca??? Según esta vigilante de seguridad cuando anden y coman con cuchara ¡¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!!!!!!!



He iniciado una campaña para hacerles entender todo esto en la biblioteca, que nos permitan dar de mamar a nuestros hijos de una forma natural y, sobre todo, para que no se sienta nadie tan mal como me sentí yo ayer.

He escrito un email de protesta a la directora de la biblioteca

Os escribo aqui el email de la directora de la biblioteca y de la biblioteca. Si alguien quiere ponerse en contacto con ellos dando su opinión sobre este tema pues aquí teneis un medio para hacerlo:



Biblioteca Pública de Burgos

C/ Valladolid,3

Directora: Carmen Monje

Email: carmen.monje@bcl.jcyl.es

Email biblioteca: bpburgos@bcl.jcyl.es



El día que se entienda que tomar teta con 2 años es tan normal (más normal) que usar chupete, se arreglara todo esto.



Un saludo y gracias a todos por leerme.



Raquel

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola guapa.

Siento lo que te ha sucedido, he enviado el siguiente mail a la directora.

Bunas tardes.

Señora directora soy madre de un niño de 2 años que sigue lactando, mi nombre es Mari Carmen Segade Quintela domicilio actual en Viladecans Barcelona.

Supongo que para ser directora de una biblioteca se requiere un cierto nivel de conocimiento, a parte de diplomatura o licenciatura, o cualquier otro título universitario.

Doy por supuesto que es Ud., una persona informada y con cierta cultura.

Desconozco si es madre o no, o si tiene intención de serlo.

Pues bien, se permite a los niños que se suban en las sillas con los pies los cuales han pisado un suelo lleno de gérmenes y restos orgánicos de excrementos, no se les reprime, lo he visto en cientos de bibliotecas, me encanta ir a visitarlas siempre que viajo, y casi todas son igual.

En cambio algo tan natura, limpio, sano, eficaz, amoroso y un sinfín de adjetivos es tratado con reprobación y como un simple acto nutricional, ni en los países llamados subdesarrollados no musulmanes se produciría un acto tan indicto para una madre que ama a su hijo.

Soy licenciada en derecho, no creo que tenga usted ninguna norma tal que impida realmente a una madre dar de mamar a su hijo ni de un mes ni de 5 años, puesto que es un acto de racismo, que podría ser denunciado ante los tribunales, aunque sin llegar tan lejos podría acabar en los medios de comunicación y tendría que explicar ante los mismo cuales son los motivos de dicha prohibición.

Espero sinceramente que haya sido un acto de exceso de celo e interpretación efectuado por el vigilante de la biblioteca y que tome las medidas oportunas para que no vuelva a suceder, y pida disculpas a la afectada la cual quedará enteramente satisfecha con las mismas.

Un cordial saludo.